El post anterior terminaba indicando que debemos transformarnos para que el sentido de la vida del hombre deje de ser una vida sin sentido, para ello tendremos que vivir en armonía..., para vivir a plenitud.
En esa publicación también describí lo que significaba para mí el vivir a plenitud y se resumía en vivir con un sentido, parece un juego de palabras y ciertamente lo es. Las palabras que se juntan armoniosamente para ir construyendo lo que queremos ser.
Por mis manos ha pasado el libro: "Trabajar en armonía para vivir a plenitud" de Linda Duque, lo compré por el título, porque en algún momento me dije: "¡Tengo que replantearme el trabajo que hago y compaginarlo con mi vida, de forma que no me pese, sino todo lo contrario, sea un verdadero placer!". Lo compré y antes de iniciar la lectura vino a mi mente el título de esta entrada: ¡Vivir en armonía para vivir a plenitud!, esto porque pensé que la armonía no debe estar solo en el trabajo, hay que trabajar para vivir en ella.
Así llegó otro libro a mis manos, impactante en todos los aspectos "El hombre en busca del sentido" de Viktor Frankl; esta lectura fue la semilla de mi post anterior y debo admitir que quizás se vea reflejado en muchos otros, debido a su impacto y realidad palpante en nuestros días.
Con esta entrada quiero hacer una mezcla de ambos libros, esas palabras que plasman que incentivan mi "gusanito" interior de transmitir en breves líneas, semillas para nuestras almas. Vivir en armonía nos plantea la necesidad de vivir en equilibrio. Linda Duque define equilibrio como "esa cualidad de poder mantenerse firme ante la tempestad". Hemos escuchado la frase "Dale a cada cosa su justo valor y proporción" y esto me lleva a preguntarme ¿Entendemos realmente lo que significa Valor?
Nuestras vidas giran alrededor de muchos aspectos, la familia, el trabajo, la sociedad, amistades, salud, descanso, diversión, alimentación, dinero, educación, religión, gobiernos; un sinfín de factores internos y externos que de no colocarlos en el lado correcto de la balanza y lograr con ello el equilibrio deseado, comienza el desbalance a hacer mella en nuestro existir.
Vivir en armonía es sinónimo de disciplina, con esta el compromiso y el respeto hacia lo que hacemos, cómo y para qué lo hacemos.
Vivir en armonía refleja nuestro Yo como comunicadores, ¿cuántos fomentamos la escucha activa mientras mantenemos una conversación o formamos parte de ella? Esta capacidad y cualidad cuando no la mantenemos en equilibrio, rompe de manera dramática la armonía a nuestro alrededor y sobre todo en el interior.
Valoremos la calidad de vida que llevemos, que fomentemos y seamos transformadores en una sociedad donde hasta el silencio grita la necesidad de vivir en armonía, de equilibrarnos.
Regalémonos y regalemos el placer de escuchar el silencio, de disfrutar solo el sonido de la naturaleza, de abrir los sentidos y escuchar su mensaje. Disfrutar la armonía perfecta que ella representa y extrapolémosla al día a día, al hogar, trabajo, escuela. Linda Duque refleja el vivir en armonía en una de sus cápsulas de uso diario en la siguiente frase "Es integrar dentro de un proyecto único, nuestro avance personal, familiar y profesional, con eficiencia y felicidad".
Encontrar el verdadero sentido de la vida, solo se logra con la armonía de nuestro interior, que se refleja en la mirada, el respirar, en las palabras que modulamos con o sin sonido.
Evalúate, analízate e identifica lo que rompe tú armonía interior, canalízalo y busca otros elementos que lo equilibren o simplemente toma la decisión de "transformarte", los cambios no son fáciles pero muchos en el tiempo perfecto, nos dejarán un dulce sabor a miel en los labios.
Vive en armonía, aprende a disfrutar, a dejar fluir, equilibra tú ser interior con el externo......
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